¿QUÉ DEBO HACER PARA CONSERVAR BIEN UN QUESO?

Comienzan a llegar temperaturas primaverales (y eso que aún estamos en febrero, pero ya se sabe... el cambio climático tiene estas cosas), y nos preguntan mucho qué es lo que podemos hacer para conservar el queso de forma regular, pero más aún cuando llega el calor, y es que no hay que olvidar que el queso es un producto vivo.

Si queremos que un queso (sea de Quesos La Val, o no; siendo esto segundo a todas luces incomprensible... 😜) es importante conservarlo de manera adecuada, y te vamos a dar unos consejos para conseguirlo:

• Los quesos con corteza (curados y semicurados) se deben conservar a temperaturas entre 8ºC y 12ºC.  Los quesos de pasta blanda (frescos) entre 4ºC y 8ºC.
• El lugar más apropiado para guardar un queso es una quesera..., obviamente.  Es necesario que tenga algún agujero para que el queso respire y que la superficie en la que se coloca la pieza no sea de madera (sino la madera se impregna con el propio queso y puede acabar oliendo mal).
• Si los conservamos en el frigorífico es mejor colocarlos en el cajón de la verdura, ya que es la parte menos fría de la nevera y, sin embargo, seguramente la menos utilizada para guardar el queso.  Cuando vayas a consumirlo intenta que esté en su temperatura ideal, entorno a unos 20ºC, por lo que recomendamos, si es posible, sacarlo unos 15-20 minutos antes del consumo del frigorífico (a veces es imposible... ¿quién no ha abierto la nevera, ha visto la cuña de queso, y no ha podido resistirse?).
• 
  El queso debe "respirar”, es decir, no debemos guardarlo hermético una vez abierto.  Si queremos consumirlo fuera de casa recomendamos envolverlo en el envoltorio original, con papel film o papel de aluminio (no pasa nada por usar un recipiente tipo táper, pero teniendo cuidado de que la ausencia de oxígeno haga que el queso fermente).  En casa lo podemos mantener cortando la pieza por la mitad, y colocándola “boca abajo” sobre una bandeja que lleve unas gotitas de aceite, y es que el aceite de oliva es ideal para la conservación del queso.  ¿Has probado nuestro queso en aceite de oliva trufado?  ¡Es-pec-ta-cu-lar!.
• El tiempo de conservación depende del tipo de queso.  Los frescos no se deben conservar más de 15 o 20 días.  Los quesos semicurados y curados pueden conservarse durante meses.  Si el queso está durante cierto tiempo sin consumirse puede generar una pequeña capa de moho, fruto de la maduración, es decir, algo normal y propio del queso que, como hemos dicho, es un producto vivo.

Ya sabes, ya no hay excusa para no disfrutar de un queso en todo su esplendor en cualquier época del año... y a cualquier hora del día.  El queso es un alimento con un gran valor nutritivo y aporta proteínas, vitaminas,...  pero eso os lo contamos otro día.

Mientras, vamos a degustar un Queso Artesano de Leche de Oveja...